El 8 de diciembre de 1951 fue la fecha elegida por Carmen González Roca (fundadora) para sellar el deseo de Dios de hacer crecer una nueva semilla de vida consagrada en la Iglesia Canaria y la respuesta generosa y confiada de un grupito de mujeres que ya llevaban tiempo trabajando con los más pobres y desfavorecidos, dejándose llevar por la promesa de fidelidad de Dios.
Por la infinita misericordia de Dios ha llegado el día de hoy, otro 8 de diciembre, y seguimos dando gracias por esta bendición del Instituto en la Iglesia y para el mundo.
Dios no nos quiere masa, pero si fermento y sal que hacen que la vida tenga sabor a Dios.
Escondidas en el corazón del mundo con el corazón ardiente de Dios nos dice el Papa Francisco y es que no puede ser de otra forma. Sentirnos llamadas y tocadas por el fuego del Espíritu nos impulsa a responder amando a Dios en el corazón de los hombres y mujeres con los que compartimos la vida a diario.
Además, en este jueves 8 de diciembre en la parroquia de San José Obrero, estamos celebrando que Bernardita y Maura renuevan sus terceras promesas; Fátima hace 25 años de sus votos perpetuos y con gozo acogemos a Denys María, una nueva incorporación en esta forma de vida consagrada en el mundo.
La celebración de la Eucaristía estará presidida por D. Francisco Ozoria, arzobispo de la arquidiócesis de Santo Domingo y allí acompañaremos a estas hermanas junto a sus familias y amigos todos.
Te invitamos a unirte en esta acción de gracias desde la fe y la oración!
Que nuestras vidas al igual que María.